Los trabajos de investigación desarrollados desde el año 2017 en la ciudad romana de Confloenta se han centrado en un conjunto de parcelas situadas en el extremo sur de la ciudad. La excavación arqueológica ha permitido la identificación y documentación de las termas meridionales que ocupan una superficie cercana a los 2000 m2. Concretamente se ha trabajado en su sector occidental, localizándose varias de las estancias propias de estos edificios públicos destinados al baño y ocio de los ciudadanos.
La fachada suroeste del edificio se levantaba sobre grueso muro de aterrazamiento, realizado en emplecton (núcleo en hormigón de cal y arena –opus caementicium– y paramento exterior en mampostería –opus incertum–, con piedras encastradas directamente en la fábrica de hormigón), que servía para aterrazar el terreno y así conseguir una plataforma sobre la que levantar los muros de las distintas estancias. Al oeste de dicho muro, en su exterior, se disponía una rampa escalonada de 120 m2, paralela al Kardo Maximus que dirigía directamente a la puerta suroccidental de este complejo. La fachada occidental continúa en dirección norte paralela a esta calle principal de la ciudad.
El mencionado acceso da paso a un pasillo en forma de L, con un brazo se dirige hacia el norte, paralelo a la fachada, y el otro en dirección este, a modo de vestíbulo. Desde este espacio se accede a la primera de las salas, decorada con mosaico de motivos geométricos, que se ha identificado con el posible apodyterium (vestuario). Al norte de dicha estancia se sitúa el frigidarium (sala de baño frío) con su correspondiente piscina. Al este se colocan las habitaciones de baño templado (tepidarium) y de baño caliente (caldarium), ambas dotadas de un sistema de calefacción basado en la circulación del aire caliente a través de una cámara (hypocaustum) habilitada bajo los suelos de las estancias, soportados por pilas (pilae) de ladrillo, alimentada por un horno situado en el sector noreste de este conjunto de habitaciones.